Jueves 15 de Ocrabre de 1914. Núm. 1.140. ■y COÏCEHTADO IíCS pss-os en Is prc- ED Toledo: t/» «es, í'00 pía. -En las demás provincias: Th í„Wíre «so««se^íre,^; «h afu,, i2'00._Eael extranjero: í7narw,3M0 ' jíüinero corriente, 5 cénts. -Número atrasado, lO cénts. Fundador: ANTONIO GARIJO Esdacción 7 Jtorrtntndftii Calle del tosrcio, ntm. 12, Tdf. 89. donde se dirigirá toda, la correspondencia. -^* En la cabecera de la 1* plana, línea, 0,50 p tas.— En 1* plana, línea, 0^5,— En Ir plana, línea, 0 í?i.— En 3* plana, línea, 0,10.— En 4.* plana, línea, 0,05. La 4.a plana, 35.00 pv.as .— Hedia íd^ 15,00.— Un cuarto id-, 6,00.— Comunicadoi y reclamos, linea, 0,25.— Esquelas funerales, en 1.* plana, 10,00.— En 3* id., 5,00 tu üü le la mm El ejemplo no puede ser más elocuente. Los belgas, no obstante todas las leyes internacionales, se han visto mezclados en la guerra, y no han encontrado ni auxiliares ni cooperadores eficaces de su defensa. La moraleja inmediata es que no basta no querer la guerra. Aun no queriéndola hay que prepararse para ella, y no puede confiarse en el auxilio do nadie, sino en las fuerzas propias. No olvidemos nosotros los españoles la situación geográfica en que nos encontramos y se verá la necesidad de una preparación militar eficaz, apropiada á nuestros medios y circunstancias, pero de un rendimiento útil máximo dentro de los mismos. El ejemplo de lo ocurrido á Bé'gina ge presta á muchas meditariones y ofrece Do escasas enseñanzas. Anteayer apuntábamos algunas; hoy queremos of -ecer lo que pudiera llamarse lección de conjunto. Si hay algún país en el mundo que pndiera encontrarse descuidado teórica-, mente para la guerra ese país es Bélgica. Garantida su neutralidad por una Declaradón Internacional, y cambiados sus antiguos hábitos guerreros por otros más pacíficos é industriales, podía creerse á cubierto de cualquier empresa guerrera. Mediaba, además, otra circunstancia: el interés de Inglaterra. Es la Gran Bretaña la primera interesada en la neutralidad belga; tanto que las fortificaciones de Flesinga no se realizaron precisamente por la oposición de Inglaterra, que necesita tener de dueños de la costa del mar del Norte á pueblos pequeños como Bé'gica y Holanda, que no hagan sombra á su poderío marítimo. Es la misma circunstancia que la hace desear sea España la poseedora de Ceuta y no Alemania ó Francia, por ejemplo. ¡Ah! Pues, sin embargo. Bélgica, constantemente, ha pensado en su organización militar, y el problema del servicio militar obligatorio, base de la defensa 1 cerlcs hablar, aunque se les diga que exnacional, ha sido el primero de los pro- pongan, como quie-an, aquello que nosblemas políticos, determinando crisis, otros sabemos que aprendieron bien; parece que se ha puesto candado á su lengua y que ataron las alas de su inteligencia para impedir que vuelen de un punto á otro en busca de un ideal. Pues sentes y se ha visto la razón que tenía I bien; he aquí lo que consiguen los maes- Decíamos en nuestro artículo anterior, que con la lectura reflexiva y en la explicación que de la misma tienen los pequeños que hacer, se acostumbran á razonar, á sostener una controversia y á exponer sus ideas, obras que constituyen para ellos una verdadera necesidad. En efecto; los niños son extraordinariamente locuaces, no cabe negarlo; pero pedidles que hablen sobre un determinado tema y veréis qué pronto enmudecen, sin que haya manera humana de ha- cambios de ministros, debates parlamentarios intensos, hasta escisiones en el seno de los partidos. Han llegado las circunstancias pre- Bélgica para prepararse ella, sólo ella. ¿Qué hicieron franceses é ingleses para defenderla? En la conciencia de todos está que hicieron bien poco. Los francés s cuidaron antes de lo suyo que de lo belga, y por si acaso la entrada de los alemanes en Bé'gica era una mera diversión estratégica concentraron en el Este francés sus tropas. Después tuvieron que perder el tiempo en un cambio de frente, y así resultó que el general Joffre llegó sólo á Charleroi, y llegó tarde y en malas condiciones. De los ingleses no digamos nada, pQps á éstos alcanza menos disculpa que á Francia. Al fin, el Ejército francés ha vÍ3to invadida una gran parte de su Pa^ia y justo es que atienda preferentemente á la defensa de ella. Inglaterra no; ^Inglaterra ha tenido libre el mar del ^0rt9 para desembarcar contigentes en Dunkerque, en Ostende. Todo lo que hizo fué desembarcar üuas tropas de infantería de Marina en Oitende, sh duda para guarnecer la ciuuad y dc-j^r libre á la Guardia cívica; y femar parte en la batalla de Charleroi, instituyendo en Mons el ala izquierda ^ Ejército aliado. ^to fué io que hizo en el mes de y Septiembre. Lleg-5 Or.ubre, y ^ éllaamenazi decisiva, apremiante, Jtea Ambles. Los belgas se áotiero? -J^eates-y era mar na-aral— p?ra ■^•Utip á tres cuerpos de Ejército, pro^:03 poderosa artillería gruesa, y incitaron el auxilio bntámcol ¡Todo asilio consistió en 8.0D3 hombré?! : afco:ra « ^ieo en rve para que el Almjran-^ a commicación oncial = ^ " 1 "íe de que gracias áesss tropss lo? -épuáieron s-j ániso- resii^2--- tros alemanes con sus procedimientos empleados en educación: hacer que los niños hablen y que se vea en éstos quién es el que discurre y quién es el que reflexiona mejor. Pero no se crea que la lectura es el todo, no; es un pretexto para la enseñanza objetiva que viene íüegó, y los ejercicios orales de asociación de ideas que tienden á fortificar la inteligencia del niño, á fin de que vea claramente las muchas dificultades que ha de hallar en la ruda batalla de la existencia. Con la enseñanza objetiva se desarrollan y perfecionan los sentidos, puesto que reciben múltiples sensaciones que hacen á la sensibilidad fina en extremo. Y como esta facultad sirve al niño y al hombre para percibir los objetos materiales sensibles y experimentar afecciones internas, dependientes de las percepciones; cuanto más perfecto sea su desarrollo, cuanto mejor educada esté, tanto más claras serán las ideas adquiridas y de manera más precisa quedarán estereotipadas en el cerebro y profundamente grabadas en el interiorde su alma. Las sensaciones forman una de las fuentes principales de conocimieato. Por ellas adquirimos, sin que nadie nos io enseñe, la noción del bueno y mal olor, del bueno y mal sabor, de lo blanco y lo nptf ro, de la claridad y la luz, lo bonito y lo feo. Lo que nos indica que. cuando se trata de las propiedades de los cuerpos, el pssmen de los objeics será siempre más comprensible y más exacto que la mejor f x^Iicación dada por el más culto t el más hábil de los maestros. Por este moávo, después de la explicación razonada de las ideas contenidas en cualaaier libro, acuden dichos profesores á l¿s l=c;::a=¿ ie ::íü =-r lcíoitos no tendríamos inconveniente alguno en llamar enseñanza intuitiva, experimental, puesto que hin de disponer de variados objetos con que realizar diversas experimentaciones para que los niños, siempre curiosos, los vean, huelan, gusten y toquen. Dar una lección de Física sin aparatos, de Química sin ningún material, de Historia Natural sin seres orgánicos é inorgánicos, de Gsografía sin mapas y de Matemáticas sin clarión, es lo mismo que poner una mesa con muchos, platos, pero sin comida; que conceder un título nobiliario pero sin medios para ostentarlo; como tener un reloj sin horario, como disponer de un capital enorme, pero estar en una isla desierta donde no se puede comprar nada de lo preciso para la nutrición y sostenimiento. ¿Y hay quien da lecciones así? No son, por cierto, los alemanes que tienen un amor grande á la cultura y no escasean para ésta nada; pero hay qnien se ve precisado á ello, indudablemente por necesidad, por carecer de toda clase de medios. ¿Quién es? Paciencia, que muy pronto lo vamos á decirlo. Mariano Gómez Santamaría. NUESTRO CANCIONERO En el ambiente de sosiego de e?te crepúsculo otoñal, flota una nube de coral en una atmósfera de fuego. Sobre el jardín su giro ciego traza un murciélago fatal, y hace á un arroyo de cristal una libélula su ruego. Entre las flores del vergel revienta rojo de pasión el entusiasmo de un clavel; sobre el florido naranjal la Luna empieza su ascensión como una lámpara nupcial. JULIO DE ÜGAETE. MIRANDO EL PRESENTE SOBRE 1L.4. GZBniZL· La palabra guerra, puede decirse es moderna, pues en la Edad Media apenas se usó, empezando á propagarse en Castilla á principios del siglo XUI, empleándola D. Alfonso X el Sabio, en una de sus obras. Visto que las actuales circunstancias preocupan grandemente la opinión pública, expondré, aunque con alguna brevedad, algunos datos acerca de lo que es la guerra. Se puede definir de varias maneras, y entre ellas, las mis principales, son las siguientes: La guerra es un acto violento, destinado á forzar á nuestro adversario á someterse á nuestra voluntad, es el estado de lucha armada entre dos naciones, y el juego sangriento de la fuerz* y el acasr-; es el f.-u:o de la venganza, sed de repre>alía?, necesidad impues a por la fuerza, violencia, espíritu de dominación; e-i el choque material de las fuerzas destructoras de que disponen tíos poderes sociales que se nallín en oposición de intereses, y, por último, es el jiiq^e Tiíz ei:re 1>5 ideas 6 i2¿::ze= I que informan, agitan y mueven á pne¡ blo> ó partidos diferentes en un períoí do ó en un momento histórico determinico. El ministro alemán de las colonias, ha declarado que con sus enemigos del continente, combaten los alemanes por el honor de la victoria, mientras que con Inglaterra combaten por el botín, y que si como esperan, salen vencedores, sólo á Inglaterra harán pagar los gastos que les ocasione la contienda. En este caso, podemos decir, que la presente guerra, es el choque material entre dos poderes sociales en oposición de intereses. Se conoce que los alemanes consideran á Francia tan pobre, que no esperan sacar botín alguno de ella, y por eso, su objetivo principal es Inglaterra, de la cual esperan sacar todos los gastos que les ocasione la guerra y los que no les ocasione. Verdadero egoísmo. Pero, en fin, dejemes esto, y prosigamos: la guerra, ¿es arte ó ciencia? La guerra desde el punto de vista militar, y referente á lo que se llama reconocimientos del terreno, formaciones tácticas, planes estratégicos, etc., no es más que arreglos particulares, colocaciones provisionales para mejor esclarecer y llegar á una solución determinada; y, entonces considerada de esta manera, es un arte. La táctica puede también considerarse como un arte distinto. Es empírico, pero puede ser más fácilmente construido por el tipo de los artes científicos, porque las ciencias fundamentales de que depende, están más adelantadas. El arte de ingenieros, es esencialmente científico; la fabricación artillera tiene el mismo carácter. Ambos descansan en las ciencias matemática, dinámica y fí-ica, y en estos sentidos puede clasificarse como ciencia. Así es, que la guerra, en su aplicación material ó práctica de sus principios, es arte; y el estudio de éstos, es el estudio de una ciencia. Por lo tanto, la guerra es una ciencia, sino exacta, al menos aproximadamente, pues ofrece el mismo carácter que las ciencias morales, y que sólo cuando se separa del cálculo exacto de las ciencias y necesita de la inspiración del artista para hacer productivos los auxilios y métodos que suministra la ciencia, es arte. Un arte militar no es una ciencia, es un arte que nunca se deja encerrar en los límites de la ciencia sobre que descansa. Telesforo Pérez López. Villaseca-13-10-914. UNA CARTA ÉPICA De Le Journal: 'Esta carta ha sido escrita en tierra loreness; es ruda, vehemente, soberbia. En Lorena. país fronterizo los corazones están vigorosamente templados. Toda familia es una familia de soldados dedicada al culto de la patria. La carta ha sido dirigida por sus hermanas á un soldado mecánico del Parque de aviación militar. * * «Moyen, 4 de Septiembre 14. Nuestro querido Eduardo: Hemos recibido la noticia de la muerte de Carlos y Luciano en la batalla del 28 de Agosto. Eugenio está herido gravemente. En cuanto á Luis y Juan, murieron también. Rosa ha desaparecido. Nuestra madre llora; dice que seas fuerte, desea que vayas á vengarlos. Esperamos que tus jefes no te negarán esa gracia. Juan tenía la Legión de Honor. Sucédele tú. Nos lo han arrebatado todo. De once que estaban en la guerra, ocho han muerto. Hermano, no te pedimos otra cosa sino que cumplas tu deber. Dios, que te dió la vida, tiene derecho á disponer de ella. Es mamá quien lo dice. Te abrazamos de todo corazón, y quisiéramos verte antes de esta prueba. Los prusianos están aquí. Jandon ha muerto. Lo han saqueado todo. En Gervilüers está todo en ruinas. ¡Los cobardes!... Parte, querido hermano. Hsz el sacrificio de tu vida. Tenemos el presentimiento y la esperanza de volverte á ver. Adiós, y hasta luego, si Dios lo permite. Tus hermanas. Es por nosotros y por Francia. Piensa en tus hermanos y en el abuelo, que murió el 70.> * « Cuando esta guerra terrible termine habrá que recoger todas estas admirables cartas. Se encontrarán innumerables y preciosos documentos acerca del arma francesa... ¡tan mal conocida! Entre esas cartas ocupará un lugar preferente esta que firman: Tus hermanas. Ernesto Lavisse. De l¿ Acadesiia F.-tnceii. Ctisultorio-Clíiica Operatoria, GaMoete k MmM Mica y jj^jj | ¿Le les dseteres Xfi&ez de Arce, 23. íeleiono I0.-TOLEDO DOCTOR PIGA Enfermedades de Pulmón j Corazón: Los lunes, de 11 á 1 y d'e 3 á 5. DOCTOR DELGADO Todos los días, menos los festivos, de 2 á 3 y de 5 á 7. DOCTOR SÁNCHEZ LAULHÉ Ecfermedares del a; respirat ■ ri : i DOCTOR FERNANDEZ-CRIADO Ue. Esspiai de Sa= Jzxz d« Dios y de !■ Facilaá i* (Hospital da 3»a Carioij de M*drid- Eníermedadjs de la Piel, Venéreas y Sif!:::-?: Los domingos, de 11 á 1 y de 3 á 5. DOCTOR FERRÁN BRUSÉS Enfermedades de los niños: Los martes, de 11 á 1 y de 3 á 5. DOCTOR SÁNCHEZ MORATS Eníer-nedades de los ojo?, t:ccs los cías de 11 ú 1 ¿3 -L·ZZr- zzzz zz 3ls.52 daar-á'.lsls y zzrzz'.£.zr.zs-.'.zr