LA REVISTA do la noche en la calma sonó no beso que apagó con sn cauto el ruiseñor. ¿Te acuerdas cuántas noches silenciosas aspirando »1 perfume de las rosas que para tí arranqué me dijiste lo mucho que me amabas que tu única ilusión en mí cifrabas y yo que te adoraba 001116810?... Pero todo pasó como pasaron las flores que su cáliz desplegaron la dulce pilmavera al empezar... fFué preciso |)artirl y al separarnos y en un l>edO el postrer adiós a! darnos oraí que de dolor iba á espiiar, LuegOj después.,, un barco que se aleja un coMzón herido que se qu“ja y una virgen que llora su dolor, olas tras olas en eterno vuelo .. y un hombre sollozando sin consuelo por el perdido amor. Adiós mi eterno bien, mi úuico anhelo, tu recuerdo es mi único consuelo en esta soledad mi última esperanza está en el cielo... del cielo en la azulada inmensidad. Eduardo Girbal Jaume TE PRIlSrCJFAL La tempestad.—Miss Helyet—Marina.—La marcha de Cádiz.—El milagro de la Virgen.—El hijo del mar.—La h'uja. Seis funciones y seis magníficas entradas lleva á estas fechas la compañía de’zarzueia dirigida por el maestro Catalá y que debutó el día 21 en el teatro Principal, Todo el mundo ee ha hecho cruces—y por lo tanto bien puedo hacérmelas aquí—de los grandes resultados que en taquilla se obtienen, resultados que hacia muchísimo tiempo no se dalan en ningún teatro de Alicanfce, y que no obtuvieron, sin que esto sea hacer comparaciones enojosas ni menoscabar los prestigios de los artistas que hoy funcionan en el Piia- oipal, otras compañías de las llamadas de primo cartello. Recientes están aun los fracasos sufridos por lasfotmaoiones líricas y dramáticas que á los teatros de la capital trajeron Bargas, Goula, Cepillo, Carmen Cobeña, González,feto. El público, sin atender poco ni mucho al relevante mérito de aquellos cuadros artísticos, quedóse en casa, y de allí no le atrancaron ni quejas ni excitaciones de periódicos y aficionados. Hoy ese mismo público, sin que nadie se lo matode, sale de su retraimiento y llena la sala y las taquillas de! elegante teatro Principal. Huelgan pues toda clase de consideraciones, con las cuales pudiéramos causar molestias, cosa que está muy lejos de nuestro ánimo, y limitémonos á celebrar el renacíMienio del público á la vida artística, felicitando á la actual empresa que ha logrado coronar la que mu chos, con grandes merecimientos, no pudieron llevar á cabo. * * Y vamos con la compañía. Cuatro tiples, las señoritas Soriano, Baeza, Fons y Fernández, se han presentado ante el público y han sido recibidas por éste con toda la galantería que el nuestro guarda para tales ocasiones. La señorita Soriano posea una voz que maneja con regular arte. No es una estrella ni aspirará seguramente á serlo: ha cantado «La Tempestad» (Angela), «Miss Helyet» (Lola), «El hijo del mar» (Lucía) y «La brujo», saliendo airosa de tan difíciles empeños. La señorita Fons, conocida ya de nuestro público, entre el cual tantas simpatías tiene, y las señoritas Baeza y Fernández, han sido también muy aplaudidas: aquélla en ei papel de protagonista de la opereta de Audrán, y la señorita Baeza en la María de «El milagro de la Virgen». El tenor Ríos muy joven todavía, posee una bonita voz; voz que bien dirigida y estu liada sería más que suficiente en timbre y extensión para lucirse y brillaren la escena de la zarzuela. Hoy no pasa de ser un tenor aceptable, á causi del poco estuaio que el Sr. Ríos ha hecho en el espinoso arte á que se dedica. Notásele alguna iusegpridad en la emisión de la voz, y esperamos verle más adelante para juzgarle mejor, debiendo servirle estas líneas de estimulo para continuar con fé el camino, áspero en sus comienzo?, del arte lírico que piofesa. Algo parecido pudiéramos decir del barítono, aunque éste revela otras condiciones relevantes que han merecido justos aplausos: el gueto con que cantó la parte de Simón en el melodrama de Ramos Cariión, acredítanie de buen artista. De Banquells no creemos que sea preciso hacer el elogio: harto conocido en todos los teatros españolea y en muchos de América, en todas partes ha sido celebrado como uno de los pocos zarzueleros que son á la vez que cantantes, excelen les actores. Otro bajo figura en la compañía, el señor Torón, joven también, pero cantante experimentado, con una voz de hermoso timbre, segara y voluminosa, con la cual se hará siempre aplaudir. Con tales elementos, no olvidando al simpático López, tenor cómico y gracioso de verdad, y algunos apreciablea artistas más que procuran complacer, resalta un cuadro bastante completo é igual. El coro bien, especialmente ei de señoras, y la orquesta mejor que otras veces, bajo la inteligente batuta del maestro Catalá. 5 ? * Las obras nuevas representadas hasta la fecha, no han sido cosa mayor, «La marcha de Cádiz» es un entretenido juguete lírico, repleto de chistes, con una musi- quilla aceptable, sin ser sobresaliente. «El hijo del mar» es un melodrama no del todo ajustado al gusto moderno, y en el cual, ai el músico no se ha lucido todo lo que podía esperarse de é), debe culpar en primer término ai autor del libro que no ha acertado á tra zar escenas de verdadero rigor dramático, y eso que el asunto, mejor manejado, hubiera podido darlas. El público mantúvose reservado y sólo arrancó tímidos aplausos un concertante muy bien hecho y mejor instrumenta ’o, por el cual merece Catalá mi iucondioíonal aplauso. Ya puede dormir tranquila «La Correspondencia Alicantina.» (Por poco no sale una verza.) La célebre trapa de la calle del Parque se ha colocado en igual sitio de la calle de la Infanta, con lo que al par que se logra que los vecinos del barrio de San Antón no tengan que echarse á nado cuando llueve, para pasar el tra yecto de una esquina á otra de la primera da dicha calle del Parque, se evitarán los desperfectos que en la misma se originan al precipitarse las aguas por la gran pendiente que presenta. (No crean ustedes que se ha llevado á efecto esta tan insignificante como necesaria mejora; lo decimos por.,, tomarle el pelo á la cAlioan- Una,») 9 * ± Ha fallecido en San Felipe (Habana), la distinguida señora doña Mercedes Iruela, hija del juez municipal de dicho punto D. JuliánIrue- la Recio, primo hermano de nuestro querido amigo y colaborador de este periódico D. José Iruela. La muerte de tan distinguida señora ha sido muy sentida en San Felipe, donde la finada gozaba de grandes simpatías por sus virtudes y bondadoso carácter. Damos el más sentido pésame á nuestro excelente compañero señor Iruela, que no hace mucho tiempo pasó por la inmensa pena de ver morir á su señor padre, por esta doble desgracia, pésame que hacemos extensivo á su afligida familia. * « Se^encuentran completamente restablecidas de la enfermedad que venían padeciendo las señoras madre y hermana de nuestro querido amigo D. Angel Caamaño el Barquero. Lo celebramos muy de veras. *. * La compañía de zarzuela que dirige el maestro Gorgé, ha marchado á Novelda, (}onde dará una corta serie da representaciones. « * 9 Sigue acentuándose el rumor de venir á trabajar al Circo la notable compañía, del señor Alegría, Igualmente se dice que un conocido empresario de ópera ha tomado en arriendo los teatros de Alicante, Murcia, Cartagena y dos más de Andalucía, para dar en cada uno tres únicas funciones, presentando dos verdaderas notabilidades en el arte. Los precios serán con arreglo á la gran categoría de dichas notabilidades. ' Imprenta de Antonio Reus