284 LA POLÍTICA DE ESPAÑA EN FILIPINAS sagramos al Sr. Fabié — creemos dejar consignado el mejor elogio que puede hacerse del digno, celoso y rectísimo Sr. D. José Velarde. Le ha sustituido en aquel cargo el limo, Sr. Don Julio García del Busto, que ya en otra ocasión lo desempeñó durante largo tiemno á entera satisfacción de los empleados de este Ministerio. Creemos que, como en la vez pasada, será el primero en defender á los empleados de verdadero prestigio contra las pretensiones de los miles de políticos influyentes que por desgracia existen en España. Por Real decreto de 23 de Noviembre último ha sido nombrado Ministro de Ultramar el antiguo y popular hombre político D. Francisco Romero Robledo; saludémosle respetuosamente, deseándole el mayor acierto en su difícil gestión. El Excmo. Sr. D. Fermín Hernández Iglesias, que desde la subida de los conservadores al Poder había venido desempeñando con grande acierto la Dirección general de Gracia y Justicia del Ministerio de Ultramar, ha pasado á la de lo Contencioso en Hacienda, en sustitución del Sr. Marqués deVadillo. En el Ministerio de Ultramar le ha reemplazado el limo. Sr. D. José A. Gutiérrez déla Vega. Como á su digno Jefe y antiguo amigo el señor Romero Robledo, deseémosle acierto en su difícil cargo. El Excmo. Sr. D. Antonio María Fabié, ex Ministro de Ultramar, ha sido nombrado — por R. D. de 27 de Noviembre último — Presidente del Consejo de Filipinas y posesiones del Golfo de Guinea. Mucho lo celebramos. Clarín, el bilioso solitario de Oviedo, ha creído criticar á dos frailes Agustinos filipinos, cuando en rigor lo que ha hecho ha sido decirles cuatro injuriosas simplezas. De esperar es que siga, por lo mismo que esos dos frailes están haciéndole sombra (esto es, adquiriendo, como críticos y eruditos, una reputación que para sí quisieran Clarín y todos los suyos); y seguirá en su tarea de pretender el descrédito de ambos, entre otras razones, porque sabe perfectamente que ni el P. Muiños ni el P. Blanco van á ir á Oviedo á lo que fué Novo y Colson. entre lo más selecto del público de Madrid; — empresa que nos es fácil de realizar, porque contamos con repartidores muy aptos, que lo son á la vez de las publicaciones periódicas de mayor crédito en esta Corte. Lo hemos dicho en cartas particulares á nuestros amigos, y no tenemos el menor inconveniente en repetirlo en público: nada queremos ganar: cuanto ingrese en las cajas de la Administración de esta Revista, lo invertiremos en la Revista misma. Nos mueve única y exclusivamente nuestro sincero cariño á todo lo filipino, y de aquí nuestro afán de propagar en la Metrópoli todo aquello que á Filipinas haga referencia, propagándolo naturalmente bajo el criterio geñuinamente español que nos inspira en esta para nosotros tan querida empresa, tanto más querida cuanto mayor es el trabajo que nos proporciona. Si, pues, sigue dispensándosenos el favor que hasta el presente, no será éste el último número doóle que demos; vendráu otros, y nuestra publicación siempre se manifestará, en sus condiciones materiales, en armonía con los rendimientos que obtengamos. Deseosos de servir bien á los que nos corresponden, hicimos activas gestiones cerca de] Director general de Correos y Telégrafos, y estamos ya en muy buenas relaciones con el digno Administrador general de Filipinas, Sr. Aguilera, quien nos ha dado la fórmula para que los números lleguen todos puntual y exactamente á sus destinos. Esperamos, por lo tanto, que á partir del presente no habrá reclamación ninguna; y en este concepto, hemos de suplicar á los que nos han manifestado sus deseos de ser óa/as, porque no recibían la mayor parte de los números, que desistan de su acuerdo, seguros de que en adelante no tendrán que lamentar lo que hasta ahora han venido lamentando, y nosotros con ellos. Para evitar confusiones en la contabilidad, y en razón de la distancia, no admitiremos en adelante ninguna suscripción de Filipinas que no sea pagada por UN AÑO, y llegado que sea Marzo, dejaremos de mandar el número á todos aquellos que no hayan abonado la anualidad correspondiente á 1892. Si el favor con que se nos corresponde aumenta, mejoraremos notablemente las condiciones de nuestra publicación sin que por ello subamos el precio; La Política de España en Filipinas es la publicación más barata entre todas las que han circulado y circulan en nuestra Colonia del extremo Oriente. Rogamos á nuestros Corresponsales que tengan presentes estas advertencias, con el fin de no cobrar ninguna suscripción como no sea por todo un año, á la vez que deben exigir de los abonados que paguen antes de concluir Febrero. El Administrador. ADVERTENCIAS Eí creciente favor que se nos dispensa, nos ha impulsado á dar el presente número , de doble lectura que los ordinarios y del que hacemos una tirada de 4.000 ejemplares, 2.000 de ellos en excelente papel glaseado, de bastante cuerpo, para repartidos gratis LIBROS SOBRE FILIPINAS Se compran, venden y cambian en las Oficinas de esta Revista. Horas: de 10 á 12 de la mañana. M. M inuesa de los Rios , impresor.