EL INTEGRISTA, 3 piensan así; que muchos, . pero muchos que ven afirmaciones tan rotundas como lamentables, envueltas en protestas tan generales y vagas, recuerdan aquellas famosas palabras con que el Cardenal Inguanzo, en las Cortes de Cádiz, comenzó á rebatirVel proyecto de abolir ía Inquisición y acabar con la unidad católica y todas nuestras cristianas tradiciones: «Este >>ataque no se presenta de frente, co;>mo lo pedia la buena fe. Si así- se »hubiera, hecho, también podria con>;testarse de frente y con mayor fa»GÍlidad..Lo que se ha hecho es : »dir uii plári" de proposiciones : ambiguas, las cuales, envolviendo sen»tidos diferentes, dan lugar á .^ue se »saque por consecuencia é ilaciones »lo que se pretende.» Y no- -es-uno - sólo, ni son ya quince ni veinte los que, en una ú otra forma me han presentado, -este dilemar-^á quiépt pretendemos engañar? ¿A los liberales, haciéndoles creer que nos liberalizamos, para; que nos ayuden • á, ven- , cer, y luego destruidos?: ¿O; Dpffp-;-. tros mismos, haciéndonos liberales., , so color y con el pretexto de que . no es más que para engañar á los libérales? t .s . .. rr-rr. Repito, Señor, Con' toda sinceridad," que tengo todo esto por disparatado; absurdo é imposible ;,_ pero .la lealtad me. íma.ndà- eomuniMrselo á V. . ; çpr mo k ^oígo^y lá':Íealíad -y la sinceridad ;me: exigen añadir, queJòbnftpa to^ y^tüntad de V;..., y contra toda la iñténcion de Llauder, el documento ha salido rit#T^ué. víy o . na en-^ cueñtro' modo de defénïèrTeC ' fír - Bien -safee-V-.i -.v-que,- acostumbrado á vivir en continua pelea, sé poco de lenguaje cortesano: si al correr dé la pluma ha salido alguna expresión . ó frase viva ó'désteiHplááaí que^ - mo-lesteáV...., bórrela y perdóneme, - que ciéptátíi'é^é-- -i&í-^mténciótf - -no •■•es ■ esa, sino al contrario, servir á VA. ¿Si í para bien suyo y de la causa de Dios y de España/Cíea V;^.. que le hablo como hubiera hatjjado' á mi propio padre si alguna Yez Hubiese creidò verle equivocado, - diciéndole lo - que aíòanzàTà mi pbbïé énténdí mién-^ to; en- el lenguaje? sincero y leal que espontáneamente brota del corazón. Señor, ^HEívTT^rtieV: ... . Ramon Nocedal. su interesante programa con las siguientes palabras que recomendamos á ios buenos catalanes: «Venimos, pues, á sostener el tradicionalismo en toda su integridad, á cora■batir en el severo espacio de las doctrinas á cuantos barrenen ó tergiversen ó contradigan los venerable? fueros de Cataluña restablecidos y promulgados nuevamente en í872 por D. Carlos, en los 'cuales se establece la Unidad Católica coñ sanción coercitiva, la extirpación de toda heregíá ,ei), nuestro Principado, la sumisión del Estado á la Iglesia , la ob.servantíà dé las Constitucione? ppr. to.dos incluso el :R),.,olaS; inmunidades:. de los naturales de Cataluña respecto á;jue-; ees, delegados, quintas, etc., etc.» * %òtítiene hermosos artículos y una sección de"«recortes» en que copia lo más importante .:de la; prensa; una expensa crónica nacional, local y de ' otras noticias; una larga sección de telégramas; secciones religiosa, judicial y ofipial; ; bur^tílj^com^rçïial y demás interesante. para- itodas las cla-r • S'e'sf 'níOvimiento de trenes, cambios cor-rientes, efectos y valores públicos, cotizaciones, etc., etc. - Se recomienda1- por su económico preció de suscricion, pues es tan sólo de 4 ¡pesetas trimestre fuera de Barcelona; r . ■ " • - . . Encargamos vivámenté á nueátros amigos que propaguen esta . noticia y den al-- nuevo -diario.' toda, la protección, i seguros de que-jamás; ¡se ampeñf irán de 'hafeV "'contribuido en lo que es verdaderamente' una' buenaobrá. - '■■ E3TA=rJ MARIS Y FLAQUEZAS. DIARIO DE CATALURA. Con este títulolia comenzado á publicarse en Barcelona ua-exoelente periódico tradicionalista, cuyo -primer número tenemos á la vista. Declara que viene ai estadio de la prensa «á sostener la integridad de los principios que en la.bandera Dzos^ Patria:^ ñey yieneu involucrados, y que en mal hora ppr, falta de refiesion... se han sofisticado -todos .de ■■ manera lamentabilísima.» Y termina r3. EEpériódico carlista Correo Catalán, con su cambio de política ha cambia' do también dé naturajéza. "" ' Antes era un- periódico blandengue y remilgado qué jamás levantaba la voz sobre su diapasón ordinario,- como no fuese pa. ra habrar.x ^ ^ ¡Toma! si la ha recibido el Co^oí como què ef mismo sé la'Habrá man^' dado después ' de habèrlà: adobado y : compüésto. ¡Y cuán" sátisféchosi^ han de haber quedado los leales de esta I provincia y cuán estupefactos, al ver el talento y la asombrosainventiva de los hombres del Correo Catalán, sus jefes dé última' invención! Pero, vamos á otra maña de mayor : calibre, que ya denunciamos en nuestro número anterior. Se: trata dé la imposibilidad de haberse leido en Venecia el dia 6 del mes actual nuestra decláracion, publicada por primera vez en el Diario de Lérida del diá 4; ■ \o cual hace que no se pueda concebir cómo el señor Duque . de Madrid hubiese podido leerla antes del referido dia 6 ni siquiera el mismo dia 6, como así lo afirma el señor Melgaren ; su carta de igual fecha, que como hemos 4i¿o, muchos por tal motivo la conáderau apócrifa, esto es, no. és"crita.ni soñada siquiera por el señor Melgar que aparece autorizándola con su firma. :- j Con vendria que el Correo Catalán , terrible para sns'Jeiles, y deshaciese i loíque de no ser así podría ser una AmevSi snperc/ieria de los picaros tra¡dicíonalistas que se empeñan en ver [y poner de relieve todos los gatupej rios'de los leales. Y no basta que el Correo diga tres veces que es inexacto, como lo hizo I para escapar por la tangente al conI testar á nuestro querido compañero \ el periódico tradicionalista Fl Corlea, de Vitoria, que le presentaba una objeción parecida. El Correo debe probar que fué una realidad lo que no es posible: esto es, que la declaración publicada el dia 4 en Lérida :pudo ser leida en Venècia el dia 6. Y ■si así sucedió en realidad, merece la i cosa .que^ el Correo se . sirva explicar : cómo se hizo el milagro. Mientras éV Corm) no nos lo expli1 que, seguiremos creyendo que la carta- ..condenatoria fué fraguada más . cerca de Lérida .que de Venècia. Y . áun llegaremos á poner en duda si nuestra expulsión del carlismo fué ; real y. ■efectiva^, .¡Se dan. casos! ... j Esperamos (sentados) la aclaración^ de esa tremenda' dificultad. I - ■'«.*.. i^.ííyj ion húxt \i'S' -m' o^iík.sá» - Pi-D. El Correo Catalán sigue ■ padeciendo, además, la flaqueza en él ya crónica de anunciar espectáculos teatrales de esos que hacen caer la cara de vergüenza á un sargento de volvMariòs de la libertad y.|que Jiacen verter lágrimas de sangre á los cátóheos. . - ,j Lo iqjie puede la necesidad1. , {,3 ;-, Mlenudeneias. . : Di ce el [ Correo i Catalán por boca; de,, ganso, esto es, leyéndolo en varios peTiódicóé: «Nocedal y sus amigos se proponen proclamar ^ D., Jaime como jefe genuino del trádiciOnalísmó español. S! esto ofreciese diGeultades. transigirían antes cenias instituciones vigentes que con D.