ir-- . -»>•' / TELÉFONO NÚMERO 123 FRANQUEO CONCERTADO Uño rV.-Número 323. SE PUBLICA LOS LUNES, MIERCOLES Y VIERNES Lunes 23 de Mayo de 1927 El cuadro «Linares Rívas», en Marín por los puntos de la pluma se escapan los consabidos elogios gacetilleriles, y el informador, que bien quisiera en esta ocasión escribir sin rozarlos tan siquiera, riene que hacer esfuerzos sobrehumanos para conseguirlo. Y es que la fiesta del sábado en el Teatro Marín no puede describirse empleando frases de molde, pues aparte que por sí las supera, hubo en ella algo más que tnarca la divergente con los manidos elogios de la letra de molde que si bien pueden en un momento determinado servir para halagar una pequeña vanidad, a la larga, carecen de eficacia, máxime en una población como la nuestra, donde por conocernos todos, es de una risión apocalíptica el prodigar adjetivos que no estén en una aposición (no gramatical, aíno lógica) con el substantivo que califican, Víctor María de Sola, es un ingeniero siempre sonriente y a veces iracundo que suele tomar sobre sus espaldas las más heterogéneas actividades, porque lo esencial en él es la actividad, una actividad verdaderamente incansable. Unas veces coge la pluma y pergeña lindas crónicas periodísticas, otras organiza literarios torneos, ya se ciñe la banda edilida y preside una procesión, ya se preocupa de proyectar y construir jardines, ora escribe comedias, ora las representa... ¿Recordáis haber visto alguna vez por esas calles de Dios a un hombre polifónico que con un Boda de Quiníta Flores» bombo a la espalda toca los platillos con el pié, el bombo con el codo, un acordeón con las manos y un silbato con la boca mientras hace oscilar la cabeza para que suene la armonía de unos cascabeles? Pues así vive Sola desarrollando múltiples actividades dentro de la mayor armonía... Ya se yo (y Sola también) que esto a unos les parece bien, y a otros les parece mal; pero lo curioso de todo esto es que al único a quien esto no le parece ni bien ni mal es a Sola; lo hace porque sí, pues esto del porque sí, suele ser potísima razón de aquellos que tienen una voluntad. Hay, sin embargo, una cosa que a Sola no le puede discutir nadie y es el acierto para preparar fiestas como la del sábado. Coger un puñado de muchachas guapas, indisciplinadas, con esa indisciplina de todas las muchachas guapas y hacerlas a fuerza de paciencia, entrar en un papel, sentirlo luego e interpretarlo más tarde; eso no se consigue más que por medio de una predisposición natural de la que la providencia suele dotar solamente a algunos escogidos. Y no digamos que Sola escoge para ello banalidades. O se va por las cumbres del teatro español, o no se va. Eso hizo el sábado con la representación de «La boda de Quinita Flores>. Y vamos con ellas. Anita Fernández, esa florecita volenciana de delicada belleza, como un cuadro de Boticelli, en¬ carnó el papel de protagonista, dándole toda la sentiraentalidad que requería, con una expresión constante y sostenida, de la persona que sabe vivir una escena, y que se desprende en absoluto de todo el mundo exterior, para vivir la hora del arte. Juanita Muñoz, con una naturalidad verdaderamente asombrosa, estuvo realmente espléndida en su difícil papel de Rosa Luisa, uniendo a sus gracias naturales, que ya son muchas, la gracia de una escena representada con soltura, dicha con claridad, dando sensación de la realidad como la más consumada actriz. Cristobalina halló en Dolores Monserrat los nerviosismos de la solterona expresados con tanta maestría que difíciles serían de superar; claro es que si las solteronas fueran como Dolores Monserrat... ¿Y Manolita García Lafuente? Porque el lector dirá que en las anteriores el papel y el carácter personal tienen cierto paralelismo pero en esta linda rubita se nos dió el caso de que interpretara con igual acierto a la pacienzuda vieja Doña Trenza y a la pizpireta movible y coquetona Carmela. Por último, la gitanaza Rosita Sabino, nos hizo una doncellita como para estar tocando todo el día el timbre en la casa donde sirviera. De ellos... todos magníficamente. José Sabino, mejor que muchos profesionales; Espallargas, estupendo en su papel de fray Crístino, que nos hizo reventar de risa; nuestro compañero Juanito González, admirable en dos papeles tan opuestos como son el de don Cayo Lagartera, el poeta de ocasión, y Manuel, el gañán, este último interpretado con verdadero acierto; José Casinos, ajustadísimo y muy bien sobre todo en el papel de Amallo; Antonio Villuendas, muy gracioso y muy movido, como lo requería su encarnación de Pepete, y por último José Ortega, en sus silenciosos o semisilenciosos papeles, estuvo realmente colosal. De Víctor María de Sola, nada hemos de decir como actor, pues fué el de siempre; pero a la hora de las felicitaciones se las enviamos todas para que entre todos las reparta quedándase con la parte que crea para sí, pues en fiestas como esta la organización lo es todo y a él se le debe todo. La presentación de la escena lujosísima y magnífica, sobre todo en el oratorio del primer acto. Punto y aparte. Y este punto y aparte es para nuestro compañero de Redacción Anselmo Sanz Serrano, quien compuso para esta fiesta una magnífica poesía de presentación de los artistas que fué leída por el señor Sola, En ella nuestro Duende, se mostró el genial trovero de siempre, como el lector lo podrá apreciar en otra parte del presente número. Ante las llamadas insistentes del público, el señor Sanz Serrano, que ocupaba una butaca, hubo de subir al palco escénico, donde se le tributó una calurosa ovación. SALUTACION LEIDA EN LA FIESTA Señoras y señores: un poeta incipiente, con su prosa sencilla, con su estilo corriente, en familiar lenguaje, henchido de emoción, os brinda su saludo, cordial y reverente, poniendo en sus palabras, todo su corazón. No toméis por locura, si mi musa se apresta a amargaros la noche, acudiendo a esta fiesta uonde en aras del Arte, se rinde devoción; yo acudo fervoroso, ante vuestra presencia, Porque fui requerido, con amable insistencia y no supe negarme, a tal invitación. Cantaré con mi prosa, sencilla y castellana, esta fiesta sublime, que a Teruel engalana, fiesta plena de amores, de mujeres y flores! el más preciado ornato de la hidalga ciudad, Que rinden homenaje, tributo y vasallaje Ma virtud excelsa, llamada ¡Candad! Caridad y Belleza! las dos galanas rosas ^Ue a su conjuro mágico, sonríen venturosas Porque el Arte las puso riquísimo joyel... yo también os saludo, artistas primorosas, P?rqüe sois el encanto y orgullo de Teruel! fiante vuestra belleza, la Caridad impera, * caridad Se impone, sencilla y placentera .Q10 Pleito homenaje, para vuestra labor. emK? síemPre' como ahora, flamee esa banderá, ema sacrosanto de Caridad y Amor! ^iero pulsar mi plectro, con toda melodía, con i J?ellas mujeres, que llenas de alegría, , Ar ^ j oria y el Àrte se van a desposar. £catad mi saludo: recibid pleitesía este pobre trovero, de este humilde juglar, formáis en el Cuadro del gran «Linares Rivas», sie Ht0rnais má-s hermosas, porque sois compasivas, ¿ds tocias más bellas que un claro amanecer, «'Ca 0 neéaros nadie sus calurosos vivas? 1 1110 el lauro del triunfo, no habéis de merecer? Jamás soñar pudieran los hermanos Quintero ¿^«Quinita Flores» de rostro placentero Wr0 Anita Fernández, maravilla de amor; 5] e2carila la gracia y el decir hechicero ^ ^erra andaluza con sus labios en flor. Juanita Muñoz veréis a «Rosa Luisa». ^jer adorable, de graciosa sonrisa, que dirá sus quereres— con toda adoración... La Belleza y el Arte fué siempre su divisa, que es Rosa, más que Luisa, durante la función. De otra Rosa preciosa; de Rosita Sabino, la sultana morena; la de rostro divino, y artista por esencia, ¿qué os puedo yo decir? que es la joya valiosa, con fulgor diamantino, que a fuer de ser hermosa se tendrá que aplaudir. Veréis a una Manola, preciada maravilla; a García Lafuente, una estrella que brilla en la región del arte, por su luz celestial: es la rubia adorable, candorosa y sencilla que esta noche camina en pos del Ideal. ¡Lolita Monserrat! la de cara divina, y suprema belleza, pondrá en «Cristobalina» toda su gentileza— todo su corazón; Y será en esta noche de gala, la madrina en la boda rumbosa tan llena de emoción. Estas son las artistas, las exquisitas flores de aromas juveniles, de mágicos colores que esta noche de fiesta, las veréis debutar. Si caridad invocan, brindémosles amores que el Arte y la Belleza nos vienen a ofrendar. De los que con arrestos, dejando sus quehaceres, hoy vienen a la escena por gustar los placeres de la musa Thalía, no los debo elogiar; son jóvenes y artistas, que ante tales mujeres y al hablarles de boda... no podían faltar. Si cuando se presenten ante vuestra presencia, en su labor halláreis alguna deficiencia, yo reclamo en su nombre, generoso perdón. Concededles a todos, piadosa indulgencia ¡Por su venial pecado, dadles la absolución! Son noveles artistas: ¡la Caridad los guía! esá luz esplendente de suprema armonía que es iris venturoso j sempiterna verdad! ¡holocausto sublime de amor y poesía que redime y eleva la pobre humanidad! Y termina el poeta, porque cantar no pudo las galas de esta fiesta, ni añadir un laurel; enmudece mi lira y envía su saludo ¡a la ciudad hidalga! ¡¡Al pueblo de Teruel!! Anselmo Sanz Serrano, PERFILES Las nuevas hachilleras Si yo sintiera los pujos feministas de los ultracultos misogini zantes, al veros, lindas muchachitas turolenses, abandonar las aulas del Instituto en posesión del flamante grado de Bachiller, entonaría un canto más o menos pomposo y cursi al triunfo de la mujer tntelectualizada que revindica para su sexo los derechos que tanto tiempo monopolizara el brutal egoísmo de los hombres. TVo soy asi, por mi desgracia quizá, sino un banal obsesvador de banalidades y a tí, morenilla graciosa o rubia rutilante, que hoy piensas con pena quizá, que ya no te asediarán las inqnietudes del ayer por él problema irresuelto y la lección in* comprendida, ni me atrevo a felicitarte del todo, ni del todo me atrevo a contristarme por lo mucho que pierdes dejando atrás los años escolares de los que, pese a sus amarguras, siempre te acordarás. No. Te he visto hacer el Bachillerato alternando en la Glorie ta bajo el buen padre Sol al principio de Arquímedes y Teorema de los momentos con el último couplét oído en él Marín a las troupes pasajeras; he contemplado en tus ojos una inquietud en que se mezclaba el despertar del primer ensueño de la adolescencia con el terror al catedrático con fama de fiero; y estas incongruencias espirituales, esta heterogeneidad sentimental me dicen más de tu porvenir de mujer que las utopías feministas que plasman el tipo de mujer en el de hembra de peso pesado, que vota en los comicios, llevà tacones de goma y berrea de solteronía. ¡Tú no serás así! ¿Verdad mi flamante mujercita bachillera? Antonio C. Floriano. Los lailres | sflltodos de nola La reunión de ayer.— Acuerdos. "A las doce de ía mañana dé ayer domingo, según teníamos anun' ciado y con la consiguiente autorización del excelentísimo señor fíándolo así, a la comisión de la provincia hermana. Finalmente, fué designada una comisión, compuesta por don gobernador civil, se reunieron en los locales de la Escuela Militar numerosa representación de los padres de soldados de cuota de esta provincia. Conocido por todos el objeto de la reunión, poco hubo de discutirse, y por unanimidad, se acordó elevar respetuosa súplica a S. M. el Rey [y al Gobierno de la nación, pidiendo se dicten disposiciones que, inspirándose en normas de justicia y principios de equidad, vengan a determinar una reducción del servicio en filas, de los soldados acogidos a los beneficios del artículo 17 de la vigente Ley de Reclutamiento. Los reunidos examinaron antecedentes de peticiones análogas, formuladas en Navarra, Barcelona, provincias Vascongadas y, especialmente, las gestiones llevadas a cabo recientemente en Zaragoza, acordando adherirse en un todo a estas últimas, telegra- Francisco Ferrán, don Isidro Salvador y don Antonio Villanueva, para que en nombre de los reunidos y de cuantos habían enviado su adhesión al acto, realice las oportunas gestiones. Nos consta que la pitada Comisión ha comenzado sus trabajós, dirigiendo telegramas a la Mayordomía de Palacio, a los excelentísimos señores presidente del Consejo de Ministros, ministro de la Guerra y general Mayandía. Separáronse los reunidos dando un voto de gracias a los señores directores de la Escuela militar, por haberles cedido amablemente sus locales y haciendo votos por el éxito de sus anhelos, que en todo momento desean hacer compatibles con las sagradas necesidades de la patria. Este número ha sido sometido a la previa censura. El Banco Hipotecario de España hace préstamos sobre fincas urbanas y rústicas a «módico interés a plazos de 5 a 50 años», amortizándose insensiblemente. stas operaciones las concede el BANCO HIPOTECARIO DE ESPAÑA: 1. ° A los propietarios de fincas rústicas y urbanas. 2. ° A los propietarios de solares y a los constructores para nuevas edificaciones. 3. ° A los que teniendo hipotecas con particulares quieran cancelarlas. 4. ° A los que deseando comprar una finca, sólo dispongan de parte del valor que se les exige. No se paga impuesto de utilidades EL B4NCO HIPOTECARIO DE ESPAÑA facilita ía movilización de la propiedad. Para la tramitación oficial y cuantos informes interesen, dirigirse a JOSÉ ESTEVAN SERRANO Corredor Colegiado de Comercio y Agente de Préstamos para el BANCO HIPOTECARIO DE ESPAÑA. Murallas, número 8, principal. — TERUEL.